gentedigital.es/C. R./C.E.A
04/4/2014 - 12:45
04/4/2014 - 12:45
"Creíamos que iba a existir una salida, pero no ha sido así. Estoy decepcionado". Éstas han sido las palabras de Manolo, uno de los trabajadores de la planta de Coca-cola en Fuenlabrada, que tras 24 años trabajando en ella, ahora tendrá que elegir si trasladarse a la fábrica de Barcelona o no, después de que la empresa haya empezado a mandar las cartas de despido a los empleados que no se han adherido de forma voluntaria al plan de ajuste, dando por cerrado así el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado por la compañía.
"Yo me apunté a un traslado voluntariamente. Pero lo hice para un puesto de trabajo en Madrid central y ellos me han ofrecido uno en Barcelona. Tengo que decidir ya si irme o no, y aunque no sé muy bien qué hacer, creo que la respuesta va a ser que no", afirmó Manolo quien explicó a GENTE, que entre sus razones se encuentran sus dos hijos y su mujer. "Es muy difícil mover a toda la familia allí. Personalmente lo he pasado fatal, pero es verdad que ya no esperaba gran cosa de esta gente", apuntó.
"Es una decisión prepotente de la multinacional y con un tufo imperialista"
INDEMNIZACIONES
Según han informado los sindicatos, de 236 trabajadores despedidos por Coca-Cola Iberian Patners, se da la circunstancia de que 235 son de la planta deFuenlabrada. "Nos da la sensación de que esto ha sido un ¡voy a por ti! porque nadie nos ha explicado el por qué", dijo Manolo, que además comentó el hecho, que para el es cuanto menos curioso, de que muchos de sus compañeros despedidos se enteraran de sus situación no por la carta del cese, sino porque a las distintas cuentas bancarias había llegado el ingreso de las indemnizaciones.
MOVILIZACIONES
El sindicato CCOO ha afirmado en rueda de prensa que esto no acaba aquí, continuarán con las movilizaciones tras la "bofetada" directa a todos los madrileños por parte de la empresa y contra el cierre de la planta de Fuenlabrada. "Algo que derivará en la pérdida de un total de 589 empleos directos (trabajadores de Fuenlabrada) y posiblemente 2.000 indirectos en esta región puesto que no sólo son los trabajadores de la planta sino también seguridad, limpieza y demás", han dicho. Ven un futuro incierto y lleno de conflictos. "Estamos ante una decisión injustificada e injusta. Es una decisión prepotente de una multinacional y con un con un tufo imperialista", han insistido.
Desde Comisiones Obreras se han mostrado seguros de que su demanda de impugnación de despido colectivo contra la pluralidad de empresas que conforman el grupo mercantil de Coca-Cola Iberian Partners, que presentó un Expediente de Regulación de Empleo que contempla el despido de 1.190 trabajadores y el cierre de las plantas de Fuenlabrada, Asturias, Palma de Mallorca y Alicante, tiene posibilidades de éxito. Creen que hay razones más que suficientes, “hay materia para la nulidad”
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